Cuando el amor se cruza en el camino,
nada ni nadie puede evitarlo.
El amor es más fuerte que cualquier cosa en el mundo:
que las distancias, que la razón;
simplemente insiste y se impone.
Los lazos del amor son invisibles,
inevitables e ineludibles.
Aunque trates de cambiar de acera,
aunque te aferres al pasado,
aunque intentes no dejarlo entrar ni sentirlo,
ser indiferente con él,
aunque le cierres las puertas.
Las sensaciones y la esencia del amor,
siempre, pero siempre te persiguen.
Aunque quieras mantener al margen tu mente,
aún así, en los pensamientos te insiste,
se asoma y te acosa.
¡LA FUERZA DEL AMOR ES MÁS GRANDE Y MÁS FUERTE QUE TÚ!.
El amor nace en el corazón,
en tus pensamientos, en tu piel.
Cuando menos lo esperes,
lo imagines y sin pensarlo;
sin que ni siquiera te des cuenta,
sin proponértelo, simplemente nace...
Y así como un día el amor llega a tu vida,
también un día se va sin avisar.
Por eso, cuando al fin llega a tu vida,
colmándote de las mayores alegrías,
debes valorarlo y vivirlo a plenitud sin temores
sin reservas y sin excusas,
abriendo las puertas de tu corazón.
El amor es la experiencia más maravillosa
que podemos experimentar y disfrutar en la vida.
¡SI SE CRUZA POR TU CAMINO, NO LO DEJES ESCAPAR!
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